Los que cruzan la frontera han muerto por golpes de calor y deshidratación en los veranos. Mueren de frío en el invierno. Se ahogan en las engañosas corrientes del Río Grande o de los canales de irrigación. Los cuerpos desaparecen en los extensos desiertos y montañas, los huesos son desperdigados por los carroñeros.
Source: cnn.com